Aunque el nombre de Gene Dolgoff no es conocido por un gran número de internautas, su figura es imporescindible para entender la tecnología tridimensional. Inventor del primer proyector LCD, fue uno de los principales precursores del sistema HDTV como hoy lo conocemos así como del desarrollo de la tecnología de bajo coste que permite ofrecer contenidos analógicos en 3D. Pero sus logros no se quedan aquí, puesto que Dolgoff tiene una nueva propuesta que podría ser el paso definitivo para la entrada de las tres dimensiones a nivel masivo en todos los hogares del mundo.

Como publica Digital Trends, el experto en 3D se plantea llevar las tres dimensiones estereoscópicas a todos los televisores, incluidos los más antiguos con tecnología de tubo de rayos catódicos. El proyecto ya está en marcha y a través de una web de crowdfunding está recogiendo fondos para desarrollar un nuevo y revolucionario dispositivo. Éste se conectará al televisor y gracias a un innovador software convertirá todas las imágenes en tridimensionales que se podrán disfrutar con las gafas incluidas en el conversor.

Las primeras experiencias en los laboratorios de 3-D Vision, la compañía de Dolgoff, con el dispositivo confirman su sorprendente y gran funcionamiento. Aunque por ahora se trata de un prototipo alejado en su diseño del equipo que finalmente se comercializará, los resultados son los prometidos por el inventor. Desde películas en DVD pasando por contenidos en calidad Blu-ray o videojuegos... todas las imágenes ofrecen calidad tridimensional sin importar la fecha en la que fueron realizadas. Aunque quizá no se puede comparar con el 3D nativo que ofrecen las cámaras estereoscópicas, los resultados son más que suficientes según reconocen quienes han podido comprobar su potencial.

La experiencia de Dolgoff en este ámbito ha sido crucial para el desarrollo del dispositivo. "Fabriqué mi primera 3DTV en 1963 y fue expuesta en el museo de Brooklyn", repasa el inventor de esta tecnología, cuya pasión por el 3D se ha ido corroborando a lo largo de los últimos 50 años con sus múltiples desarrollos. Varias décadas después de sus primeras experiencias en este campo, los contenidos en tres dimensiones se han disparado especialmente en salas de cine, pero su llegada al hogar se está haciendo de rogar.

"Es un problema similar al del huevo y la gallina. Como no hay suficiente contenido en 3D los usuarios no se hacen con dispositivos tridimensionales, pero las compañías tampoco desarrollan contenidos en 3D porque creen que no hay suficiente demanda". Sin duda, el nuevo invento de Dolgoff podría poner fin a esta paradoja y suponer el despegue definitivo de la tecnología 3D en los hogares de todo el mundo.

 

Fuente: adslzone