El primer obstáculo que se encuentran los nuevos clientes es el alta, en el caso de R y ONO los nuevos usuarios tienen que abonar 35 euros. En segundo lugar la cobertura es más limitada que el ADSL y no siempre los operadores de cable pueden provisionar el servicio.

Precios más elevados

Las ofertas de 6 o 12 megas con cable rondan los 60 o 70 euros al mes, lo cual no es atractivo para la mayoría de los usuarios que pueden contratar 20 megas con ADSL por la mitad de precio. Además, aunque la fibra óptica es más eficiente que el par de cobre, los cableros no son muy espléndidos con la velocidad de subida. En ningún caso ofrecen más que los operadores de ADSL, sólo las ofertas de 50 o 100 megas superan la velocidad ascendente que ofrece el ADSL.

El cable pierde un 70% de nuevas altas

El pasado mes febrero se registraron 7.745 altas, un 62 % menos que el pasado año. Según los últimos datos presentados por la Comisión de Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) la banda ancha crece un 40% menos de media, pero el cable ha perdido mucho más terreno que el ADSL.

Para invertir esta tendencia es imprescindible que "los cableros" rebajen sus precios, eliminen las cuotas de alta y sobre todo se diferencien de los operadores de ADSL ofreciendo mayor velocidad de subida.

 

Fuente desde: adslzone