Al menos eso es lo que cuenta el diario coreano DDaily. Ya no se trataría de enfundar el móvil en una cubierta de carga, la recarga sería de verdad inalámbrica. Este sistema de carga inalámbrica es del tipo inducción magnética, siendo capaz de enviar la electricidad desde la estación de carga hasta un radio de uno a dos metros.

Aunque hay ya un buen número de fabricantes de equipos Android y los principales fabricantes de accesorios que soportan el estándar de carga inalámbrica Qi, Samsung habría decidido apostar por su propia tecnología.

Las ventajas son evidentes. Ya no habrá que conectarlo al cable de alimentación, se podrá dejar sobre la mesa y su enchufado no interrumpirá ninguna llamada. Mas a medio plazo, el sistema podría ser el mismo al menos para todos los Samsung, permitiendo que nos olvidemos un poco de la dependencia del cargador.

Las especulaciones se van a disipar pronto. El responsable de Samsung en China acaba de asegurar que el nuevo Samsung Galaxy S3 adelantaría su salida al mercado. Previsto para mayo, el terminal podría estar en las tiendas en un mes antes, en abril. Las razones de este adelanto no parecen técnicas. Según recogen en The Next Web, Samsung quiere que su nuevo juguete sea el móvil oficial de los Juegos Olímpicos, que se celebran en Londres en julio.

Por eso, quiere tener algo más de tiempo para convertir a su Galaxy S3 en el móvil del año, rompiendo todos los registros de ventas subido a la ola olímpica.

 

Fuente: adslzone