Mangham, estudiante de desarrollo de software de 26 años, se postuló como un ‘hacker ético’ explicando que pretendía mejorar la seguridad de Facebook, en una acción similar a otra que había realizado para aumentar la seguridad en el motor de búsqueda de Yahoo!, encontrando vulnerabilidades por las que había sido recompensado.

Argumentos que no convencieron al tribunal describiendo la infiltración como el “mayor ataque a una red social visto en un tribunal británico”. El fiscal explicó que, Mangham actuó con “indudable ingenio, determinación y sofisticación” en una operación calculada al detalle.

Aunque el tribunal reconoce que Mangham no había comunicado la información obtenida a terceros, ni informado del método de ataque para colarse en los servidores de Facebook, ni tenía intención de ganar dinero con ello, “sus acciones no fueron inócuas” ya que accedió al corazón de una gran empresa con 700 millones de usuarios que gastó 200.000 dólares en el caso.

“Usted y otros que se sientan tentados a actuar como lo hizo deben entender de verdad lo serio que es esto”, indica el tribunal en una sentencia que por su redacción pretende ser un ‘aviso a navegantes’ para los hacker éticos que experimentan buscando vulnerabilidades en los sistemas de las grandes compañías.

 

Fuente: muyseguridad