Hace apenas unos días conocíamos que Microsoft había acelerado los plazos para el lanzamiento de la sucesora de Xbox 360. La compañía estadounidense quiere volver a dar el primer golpe en la nueva generación de videoconsolas, que llegará en los próximos años. A pesar de que algunos responsables tanto de la compañía de Redmond como de su más directo rival, Sony, habían asegurado que el ciclo de vida de sus actuales consolas sería de una década y que hasta al menos 2015 no llegarían al mercado las nuevas, pocos creen ya en estas fechas.

Con el lanzamiento de Wii U el próximo año se dará el pistoletazo de salida a la nueva generación. Aunque los desarrolladores creen que la apuesta de Nintendo será un 50% más potente que las actuales PlayStation 3 y Xbox 360, serán las apuestas de Sony y Microsoft las que den un golpe sobre la mesa en un sector que, como ya analizamos, podría vivir un antes y un después con su llegada.

Sony aseguró que no repetiría errores

Hace unas semanas desde Sony se apuntó a que no se repetirían los errores vistos en la planificación del lanzamiento de PS3 años atrás. Microsoft se adelantó en su momento y ganó mucho terreno a la compañía nipona, que dominaba con mucha claridad el sector. Con PlayStation 4 se pretende que no se repita el mismo error pero la información de la llegada de Xbox 720 en 2013 deja con muy poco margen de maniobra al gigante japonés.

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En cualquier caso, la guerra de esta nueva generación se producirá como muy tarde en 2014. Quizá Microsoft vuelva a adelantarse, pero la postura de Sony forzará a la compañía a adelantar los plazos. Habrá que ver con qué bazas juega cada una y qué hará que los gamers se dacanten por una u otra opción. Que serán unas consolas de una potencia extraordinaria nadie lo duda, pero el ajuste en los precios finales, juegos y los servicios exclusivos que ofrezcan se antojan fundamentales para atraer a los usuarios.

 

Fuente: adslzone