Hace sólo una semana recogíamos la última información sobre los nuevos chips desarrollados por Quantenna que permitirían una ostensible mejora en el rendimiento de las redes inalámbricas. La firma anunciaba la integración de éstos en los futuros routers, de modo que la transmisión de la señal a otros dispositivos se pudiese realizar incluso a 2 Gbps utilizando el último estándar de la IEEE, el 802.11ac, que viene a superar el habitual a día de hoy 802.11n.

Sin embargo, por muy novedosa que parezca la aportación del fabricante, desde Japón llegan noticias del desarrollo de nuevos chips que dejarían las capacidades de los que se comercializarán a partir de 2012 en un nivel muy inferior. Como podemos leer en Muycomputer, el fabricante nipón Rohm ha anunciado que sus últimos experimentos con chips desarrollados recientemente les permiten alcanzar los 1,5 Gbps.

Pero ahí no queda la cosa, puesto que los responsables de estos chips se atreven a vaticinar que gracias a su desarrollo en un futuro a medio plazo se lograrán velocidades de 30 Gbps gracias a la radiación terahertz. Esto sería posible puesto que el dispositivo contaría con una micro antena que permitiría la transmisión de la señal a esta velocidad en sólo tres o cuatro años.

¿En qué se beneficiará el usuario con estos desarrollos? Como ya explicamos en anteriores entradas, una alta velocidad de transmisión a través de redes WiFi permitirá ventajas como la transmisión de datos que requieren un amplio ancho de banda a otros dispositivos como podría ser, por ejemplo, la transmisión de contenidos en HD sin necesidad de cables HDMI. Con la integración de estos chips en routers y otros equipos, la señal WiFi no tendría nada que envidiar a la que actualmente se alcanza media.

 

Fuente: adslzone