Digamos NO a la ampliación de los derechos materiales de autor sobre las ediciones.
Digamos NO a la ampliación de los derechos materiales de autor sobre las ediciones.
La Comisión de Asuntos Jurídicos de la Unión Europea ha dado su visto bueno a la ampliación de la vigencia de los derechos materiales de autor, y ahora queda la decisión del Pleno de la Eurocámara, prevista para el día 23 de marzo.
18-03-2009 - De ser aprobada, la compartición sin ánimo de lucro de canciones actualmente en el dominio público como Love Me Tender (1956), The Great Pretender (1955) o Concierto de Aranjuez (1940) pasaría a ser un ilícito civil en la mayoría de países de la Unión Europea. Numerosas obras afectadas por esta modificación, que se remontaría a obras publicadas a partir de 1914, no están disponibles en tiendas y son difíciles de encontrar; además, el Parlamento Europeo se plantea incluir las películas en esta extensión en enero de 2010, lo que afectaría a películas como como Sargento York (1941), Qué Bello es Vivir (1946) o Las Hurdes (1933). Se crea, pues una situación de escasez artificial que dificulta sobremanera un derecho, recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, como es gozar de las artes.
Los firmantes del presente documento rechazamos los argumentos esgrimidos por los defensores de la ampliación, puesto que:
Como recientemente ha mostrado Becky Hogge en el encuentro que tuvo lugar en Bruselas con los eurodiputados, la extensión del copyright a 95 años sólo beneficiaría al artista medio en unos 15 céntimos de euro adicionales por año, mientras que supondría un incremento del mismo beneficio anual de unos 4 millones de euros para “las 4 grandes” discográficas: Sony, Warner, Universal y EMI.
Por estas razones, animamos a los miembros de la comunidad internauta a que, si comparten este rechazo a la ampliación a 95 años, escriban a los miembros del Parlamento Europeo; los españoles pueden encontrarse aquí -o a través de este mapa-. En este enlace, basta hacer click en el eurodiputado elegido para ver su ficha personal, en la cual tienen a los eurodiputados a su alcance a sólo un click de distancia si usan programas de VoIP (como Skype, por ejemplo).
Es muy importante que los ciudadanos contacten con sus representantes (los eurodiputados españoles) para mostrarles los motivos de su desacuerdo e instarles a que los representen a ellos, no a la industria. Si los ciudadanos no se encuentran representados por ellos, seguramente se replantearán el sentido de su voto en las europeas de junio. Un cordial saludo
P.D.: He aquí una campaña de recogida de firmas en el mismo sentido.
De 50 a 95 años: digamos NO a la ampliación de los derechos materiales de autor sobre las ediciones