Este servicio está disponible en los dispositivos que llevan integrada la tecnología NFC (Near Field Communications), un protocolo de comunicación inalámbrica que permite el intercambio de datos entre dispositivos situados muy cerca entre sí, concretamente a menos de 20 cm.

Según el informe, todas las partes implicadas en este tipo de pagos se benefician: para los operadores móviles supone un incremento en el uso de los teléfonos y los fabricantes, que añaden nuevas funcionalidades en los dispositivos, venden más unidades. Por otro lado, las compañías de tarjetas de crédito obtienen una porción del mercado de pagos en efectivo, los comerciantes y establecimientos pueden acelerar el ciclo de pago sin tener que realizar costosos cambios de equipo y los consumidores ahorrarían tiempo, ya que las transacciones son más rápidas a través de NFC.

Esta iniciativa ya se está llevando a cabo, por ejemplo en Citibank y su asociación con MasterCard, Nokia, ViVOtech y Vodafone para  lanzar un sistema de pago por medio del teléfono móvil en Bangalore, conocido como Tap & Pay. Se calcula la participación en este programa de 5.000 clientes y 512 establecimientos mediante el Nokia 6212 y el sistema PayPass de MasterCard.

Uno de los inconvenientes de esta tecnología es la seguridad, pues no utiliza encriptación alguna y los datos enviados entre dispositivos podrían ser  captados por un tercero que estuviera en la transmisión. Aún así, la poca distancia necesaria para la comunicación entre los dispositivos lo hace difícil y constituye una fuerte barrera.

El informe puede descargarse en la web del centro.

 

Fuente desde: adslayuda